Vistas que quitan el aliento

Despertar cada mañana con la vista del lago Atitlán es simplemente mágico. Las clases de yoga al aire libre eran una experiencia renovadora. Además, el personal siempre fue muy atento y amable.

La comida variaba poco durante mi estancia, lo que puede ser monotonía si decides quedarte varios días. el baño seco presentaba algunos olores desagradables, aunque era bastante ecológico.

Despertar con la vista del Lago Atitlán es simplemente mágico, ¡no hay nada como eso! Además, las clases de yoga en un entorno natural hacen que la experiencia sea aún más especial.

Sin embargo, la comida se repitió bastante durante mi estancia, lo que fue un poco monótono y podría mejorarse.

Las vistas son espectaculares desde la terraza, se siente como un paraíso. Despertar con esas panorámicas del lago es algo inolvidable. Las instalaciones son increíbles, especialmente el área para practicar yoga, que está rodeada de naturaleza. Además, el ambiente es muy relajado, perfectas para desconectar y disfrutar con amigos.

La comida no varía mucho, lo cual puede ser aburrido si te quedas varios días.

vistas espectaculares, área de yoga inmersa en la naturaleza, eco-hotel ecológico

La comida se repetía constantemente y no había variedad!!! El baño seco tenía un olor desagradable que podría mejorarse. Agua de ducha fría, algo incómodo después de un día activo.

El lugar es impresionante, las vistas del lago son espectaculares. Sin embargo, la comida se repetía mucho durante mi estancia.

a. Vistas espectaculares
b. Ambiente relajado
c. Clase de yoga hermosa

a. Comida repetitiva
b. Baño seco
c. Agua de ducha fría

Las vistas son espectaculares, y bañarse con el volcán de fondo es de otro mundo. El lugar está rodeado de naturaleza, ideal para relajarse y disfrutar de unas clases de yoga hermosas.

La ducha estaba más fría que el corazón de un ex, ¡un poco incómodo después de un día activo!

Una experiencia mágica junto al lago

Disfruté de una hermosa mañana en la terraza viendo el amanecer sobre el lago. La atención del personal fue impecable, siempre atento a nuestras necesidades. Recomiendo aprovechar la clase de yoga al aire libre, una conexión perfecta con la naturaleza. ¡No te olvides de llevar tu cámara!

La clase de yoga fue lo mejor! Practicar rodeado de naturaleza y con vista al lago es algo que jamás olvidaré. Sin embargo, la comida se repetía un poco durante mi estancia. Pero el amanecer sobre el lago es simplemente mágico! 🌅

Las vistas son de otro mundo, despertar y ver el Lago Atitlán es como abrir un cuadro pintado a mano cada mañana. La clase de yoga al aire libre hizo que cada postura se sintiera como un abrazo de la naturaleza. practicando con el sonido de las hojas, más relajante que una canción de cuna de un coro de ángeles.

Baño seco incómodo

Las vistas desde el lugar son impresionantes, despertarse con el Lago Atitlán frente a ti es simplemente mágico. Además, el área para practicar yoga está rodeada de una naturaleza increíble, lo que hace que la experiencia sea realmente especial. La comida estaba bien y el desayuno fue un punto destacado, algo que realmente disfruté.

Una de las cosas que podría mejorar son las opciones de comida, ya que se repitieron los platillos durante mi estancia y eso se volvió un poco monótono. Además, el baño seco presentaba olores desagradables, lo cual no fue muy agradable.

Solo una opción equilibrada para una pausa momentánea en San Marcos La Laguna con una gran calidad por lo pagado. La experiencia en el comedor fue buena, me gustó el ambiente relajado y la atención del personal fue amigable. Asegúrate de disfrutar del amanecer junto al lago, ¡es precioso!

El área de yoga es genial, pero el wi-fi era lento.